Un método que cambia la forma en la que percibimos el dolor 

 Seguramente has escuchado hablar del Mindfulness, se trata de un método de meditación que consiste en buscar estar completamente conscientes del momento presente y observar sin apego aquello que nos provoca alguna reacción. Ahora, un estudio publicado en The Journal of the International Association for the Study of Pain, mostró que ésta terapia podría resultar en una alternativa para el tratamiento del dolor crónico, ya que transforma la manera en que el cerebro percibe el dolor y reacciona ante él. 

De acuerdo con una encuesta realizada por el National Health Interview Survey, 1 de cada 5 adultos en Estados Unidos sufren de algún tipo de dolor crónico. Actualmente no existe un tratamiento para el dolor crónico, un padecimiento complejo que está construido por una serie de interacciones entre factores sensoriales, cognitivos e incluso emocionales. 

Para estudiar los efectos del mindfulness en respuesta al dolor crónico, se reunieron a 40 personas que no padecen de ningún tipo de dolor crónico. En ellos, los investigadores estudiaron los umbrales del dolor a través de estímulos de calor pidiendo a los voluntarios calificar la intensidad del dolor que sentían utilizando una escala visual. 

Luego, los voluntarios fueron divididos en dos grupos. El primer grupo fue asesorado para enfocarse en las sensaciones cambiantes de su respiración sin emitir juicios sobre ellos mismos o la experiencia. La asesoría consistió en 4 sesiones de 20 minutos. Mientras tanto, los miembros del segundo grupo, pasaron la misma cantidad de tiempo escuchando un audiolibro. Al final, se analizó la actividad cerebral de cada uno de los pacientes a través de una Resonancia Magnética. 

Los resultados mostraron que el método mindfulness redujo la sensación de dolor en un 33% para los pacientes que meditaron, mientras que aquellos que sólo escucharon un audiolibro, mostraron un aumento del dolor del 18% en la Resonancia Magnética. Entonces, los especialistas concluyeron que el alivio del dolor inducido por la meditación puede asociarse con la disminución de actividad de la corteza prefrontal ventromedial, un nodo del cerebro encargado de regular la narrativa propia de la experiencia presente. 

Además, a través de un análisis detallado a los escaneos cerebrales, los investigadores concluyeron que el alivio del dolor causado por la meditación también se asoció con una separación de actividad entre el tálamo y el precúneo. El tálamo es la parte del cerebro que transmite los impulsos sensoriales, como lo es el dolor, desde el cuerpo hacia el resto del cerebro. Mientras que el precúneo se refiere a una serie de regiones cerebrales que se activan cuando las personas están reflexionando sobre las reacciones propias. 

Estos hallazgos señalan que si practicamos el mindfulness y observamos nuestros pensamientos y sensaciones sin apegarnos a ellos a través del ego, podríamos encontrar una alternativa para aliviar el dolor o la incomodidad emocional. 

La meditación mindfulness es una forma de transformar la manera en la que nuestro cerebro recibe y reacciona a estímulos externos, y como resultado, podríamos obtener mejoras en los síntomas del estrés, la ansiedad, desórdenes del sueño e incluso padecimientos como el dolor crónico. Este estudio muestra que podría ser que los circuitos cerebrales se involucren en la atención plena al presente a través de la meditación, y esto resulta en una reducción del dolor. 

Fuente: https://academic.oup.com/abm/article/51/2/199/4564147?login=false