Terapia de sonido para regenerar células 

La terapia de sonido (sound healing) se ha usado como terapia de sanación desde hace miles de años y en varias partes del mundo. Los antiguos griegos usaban el sonido para tratar a pacientes con trastornos mentales, los aborígenes australianos recurrían a instrumentos como el didgeridoo para curar afecciones desde físicas hasta emocionales y mentales, mientras que los cuencos eran usados desde entonces y hasta ahora con fines de sanación espiritual. 

Varios estudios han demostrado que una terapia de meditación guiada por el sonido de los cuencos puede reducir la ansiedad, fatiga y depresión de manera evidente. Sin embargo, ahora sabemos que los efectos del Sound Healing en realidad pueden ir mucho más allá, gracias a un estudio realizado recientemente por el Royal Melbourne Institute of Technology en Australia, que mostró que las ondas de sonido realmente tienen efectos sanadores y no sólo en el ámbito emocional y psicológico.

Un grupo de científicos realizó un experimento a fin de reconstruir tejidos y huesos humanos para ayudar al cuerpo a sanarse a sí mismo. Se utilizaron ondas de sonido de alta frecuencia para convertir células madre en células óseas a través de un método médico llamado “ingeniería de tejidos”. 

Los especialistas expusieron las células de los tejidos a ondas de sonido por 10 minutos durante 5 días. Los resultados mostraron que aplicando la presión necesaria a través de las vibraciones de alta frecuencia en puntos clave de las células, se catalizó el proceso de cambio y reconstrucción de las mismas. 

Durante el experimento, se utilizaron varios tipos de células, cuya respuesta a la estimulación de sonido fue positiva en todos los casos. Ahora se sabe que el siguiente paso para éste descubrimiento es escalar el proceso para lograr una aplicación médica para terapias de sonido. 

Los beneficios de una sesión de Sound Healing son evidentes a nivel emocional e incluso psicológico, y cada vez está más claro que también se reflejan a nivel fisiológico.

Comienza a escuchar y sanar: En calma