La ciencia del Sound Healing

En la contemporaneidad, es posible que muchos consideran la terapia de sonido como una “técnica de sanación moderna”, pero en realidad el sonido se ha utilizado con un fin terapéutico desde hace miles de años. En la antigua Grecia, por ejemplo, se usaba como un tratamiento para trastornos mentales y emocionales. Los seres humanos tenemos un instinto natural para responder al sonido, sólo piensa cómo reaccionas a tu canción favorita en cualquier contexto. 

Pero, ¿cómo funciona? El sonido se sincroniza con las ondas cerebrales para ayudarnos a alcanzar un estado de relajación profundo, restaurando la vibración armónica y equilibrada de las células en nuestro cuerpo. Las ondas del sonido pueden transformar frecuencias de energías bajas relacionadas con emociones como la culpa y el miedo en frecuencias altas, que se relacionan con el amor y la armonía. 

Utilizando instrumentos como el Gong, el tambor de mar y cuencos de minerales que vienen de la tierra como el cuarzo y el carbón, en una terapia de Sound Healing se generan frecuencias que vibran en nuestro cuerpo, y tienen un efecto positivo en nuestros órganos, tejidos y células. 

El 75% del cuerpo humano es líquido, y la materia líquida es una gran conductora del sonido, cuando las vibraciones de éste viajan a través del cuerpo, promueven la circulación, el flujo de energía y la regeneración celular. Cuando estamos atentos a un sonido, nuestras ondas cerebrales comienzan a sincronizarse con las del sonido, propiciando un estado de relajación profundo que disminuye radicalmente los niveles de estrés y resulta incluso en la mejora evidente del estado de ánimo. 

Un estudio llamado “Los efectos de la música en el dolor, la depresión y otras afecciones” realizado por Sandra Siedliecki y Marion Good mostró que la sonoterapia puede ayudar a reducir el nivel de dolor percibido en más del 20%. Además de ayudar a disminuir los síntomas de la depresión en un 25%. 

Para quienes sufren de migraña y dolores de cabeza, la música mostró reducir la frecuencia e intensidad. Al fungir como una terapia para liberar estrés y tensiones, el Sound Healing también ha demostrado tener un efecto positivo en pacientes que padecen de presión arterial alta. 

Los efectos del Sound Healing no sólo se mantienen en el ámbito emocional, ésta terapia también trae beneficios a nuestro cuerpo físico. Si todo está conectado, entonces tratar nuestras afecciones físicas prestando atención y buscando una conexión entre nuestro cuerpo, nuestras emociones y nuestra energía puede abrirnos a la posibilidad de relacionarnos con nosotros mismos y con nuestro entorno desde una perspectiva más holística. 

Fuente: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/16722953/